jueves, 26 de octubre de 2006 / Comentarios desactivados en Album Fotografico / 1.524 lecturas
Próxima estación Matillas
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martes, 24 de octubre de 2006 / Comentarios desactivados en Las fotos de Matillas.org tienen su propio espacio / 2.821 lecturas
NOTA: Hemos integrado la galería de Matillas en la sección Álbum fotográfico. Disculpen las molestias
Matillas.org ha acumulado tantas fotos que hemos pensado que era urgente ordenarlas y clasificarlas. Por eso hemos creado unas galerías fotográficas en las que de un vistazo se pueden consultar todos los archivos gráficos de la web.
Si navegan por las páginas del album fotografico observarán que pueden valorar las imágenes y añadir comentarios al pie. La verdad es que las posibilidades para gestionar las imágenes son enormes. Les recordamos que si tienen algún tema que crean interesante pueden enviarnos sus imágenes y nosotros los subiremos gustosamente al album fotográfico. En fin, tan solo les sugerimos que descubran las enormes posibilidades que nos brinda el tener todas las fotos bien ordenadas. Cualquier consideración será tenida en cuenta. Disfruten de su visita.
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viernes, 20 de octubre de 2006 / Comentarios desactivados en Álbum Fotográfico / 1.485 lecturas
Las Fuerzas de la naturaleza
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miércoles, 18 de octubre de 2006 / Comentarios desactivados en Historias del Ferrocarril: Monasterio de Ovila / 1.995 lecturas
Podríamos empezar una nueva sección en Matillas.org. La llamaríamos “Historias del Ferrocarril”. En ella recogeríamos los episodios más curiosos o importantes en los que ha participado nuestra estación. Sin embargo, como somos muy dados a empezar secciones y luego tan solo publicar un par de artículos, preferimos recogerla en a sección Historias y más adelante, si funciona, quizás le demos la importancia que se merece.
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| William Randolph Hearst |
“Erase una vez un norteamericano muy rico y muy poderoso. Su nombre era William Randolph Hearst y era el más importante magnate de la prensa de su país. El señor Hearst lo tenía todo lo que el dinero podía pagar. Sin embargo, sentía debilidad por algo que su país no le podía dar: monumentos, en especial de la vieja Europa. Su último capricho era conseguir una abadía cisterciense castellana. Con ese mensaje sus buscadores de tesoros rastrearon el terreno para localizar joyas y satisfacer el apetito ¿artístico? de su mentor. No tardaron en localizar su perita en dulce: el monasterio cisterciense de Ovila, cerca de Trillo. Sin embargo, el objetivo de Hearst no era solo comprar el monasterio, sino, desmontarlo piedra a piedra y reconstruirlo en su mansión de San Simeón, en California.
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| Restos del Claustro de Ovila |
Cuando los asalariados de Hearst localizaron el monasterio, vieron que presentaba un estado lamentable. Ahora eran poco más que unas ruinas. Fundado en el siglo XII, fue abandonado por la desamortización del siglo XIX. Sus joyas artísticas o fueron repartidas en las iglesias de los alrededores o habían sido robadas o malvendidas. El Estado se había hecho cargo del monasterio. Su interés por su conservación era nulo. En 1928 un vecino pagó al Estado 3.000 pesetas por el monasterio, quien en los albores del pelotazo inmobiliario, lo revendería a W. R. Hearst por 85.000 dólares. Aprovechando una situación política española bastante convulsa comenzó un expolio al que no le faltó tiempo. En tres meses, entre entre marzo y junio de 1931, la sala Capitular, el claustro medieval y la iglesia del Monasterio fueron desmontados y trasladados a Matillas, de aquí a Valencia, y de allí a América.
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| Sala Capitular de Ovila |
El viaje fue largo. Los sillares llegaron al puerto San Francisco, donde la odisea del monasterio no había hecho más que comenzar. Los problemas legales hicieron que las piezas fueran dispersadas, deterioradas y olvidadas en los almacenes de la ciudad. Además, en plena recesión económica, a Hearst se le complicó sobremanera reconstruir el monasterio en California. Las ruinas le ocupaban muchísimo espacio en los almacenes y no le servían para nada. En 1941 donó las ruinas a la ciudad de San Francisco, pero los Estados Unidos entraron en la Segunda Guerra Mundial y el proyecto municipal de reconstruirlo y hacer un Museo de Arte Medieval entró en punto muerto. Tan solo se llegó a utilizar una portada manierista de la iglesia en una sala del De Young Museum del Golden Gate Park de San Francisco. Por otro lado, unos monjes californianos recompraron parte de las piedras y desde 1994 están reconstruyendo la sala Capitular de Ovila en Vina, California. Todavía no han concluido. El resto de las ruinas, tras siglos de historia, y como en las películas de Indiana Jones, dormitan acumulando polvo en unos almacenes de California.”
FUENTES
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jueves, 12 de octubre de 2006 / Comentarios desactivados en Album Fotografico / 1.668 lecturas
El canal que nos lleva
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martes, 10 de octubre de 2006 / Comentarios desactivados en Matillas. Año 1929 / 1.674 lecturas
Guadalajara, año 1929
Imagínense: Matillas, años 20. En aquellos años, el turismo estaba en pañales. Es más, o no existía o no se llamaba así. Y mucho menos el turismo rural. Así las cosas, unos “abuelos” de Labordeta se aventuraron por Matillas para escribir su “Guia Arqueológica y de Turismo de la provincia de Guadalajara. [s.n.], 1929”. Los pioneros fueron Julián García Sáinz de Baranda (Juez de Primera Instancia de Guadalajara) y Luis Cordavias (Secretario de la Comisión Provincial de Monumentos). El libro, publicado en 1929, recogía de cada pueblo de Guadalajara “todo lo artístico e interesante que encierra esta provincia en su Alcarria, Campiña y Sierra”. Así, pueblo a pueblo, hilvanaban la orografía alcarreña. En lo que nos atañe, relata de Matillas:
“Lugar del partido de Sigüenza y estación del ferrocarril de Madrid a Barcelona, fundada en alto, en ladera. Tiene en la actualidad 340 habitantes y dista de Sigüenza 30 kilómetros y 60 de Guadalajara, Arranca de ella una carretera derivación de la de Sigüenza a Brihuega, en Mandayona.
Perteneció a la jurisdicción de la villa de Jadraque y al Señorío de la casa del Infantado, y en lo eclesiástico a la diócesis de Sigüenza.
La iglesia tiene la advocación de Nuestra Señora de la Blanca, sin que encierre nada digno de mención.
En la guerra Sucesión, en las inmediaciones de Matillas, se dió una sangrienta batalla, prólogo de las de Villaviciosa y Brihuega. Cerca del lugar se han descubierto ruinas romanas y mosaicos curiosos, que indican la existencia de alguna población o villas romanas.
Hoy es conocida por una magnífica fábrica de portland artifciail, construída junto al ferrocarril por una Sociedad inglesa”
Siguiendo con la curiosidad de todo ratón biblioteca que se precie, leemos que Cendejas de La Torre tenía el doble de habitantes que Matillas (694 hab.). Además de ella resalta su iglesia reedificada en 1773 y sus restos íberos. De Villaseca indica que “en su iglesia hay un altar muy antiguo (…) de principios del siglo XVI”.
Aunque el documento resulta bastante anecdótico, es interesante en cuanto a la visión que un viajero de los años 20 se podría encontrar de Matillas. Si desean ampliar la información, sepan que la consulta del documento es gratuita vía Internet gracias a la UCLM. Más información haciendo click aquí
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viernes, 6 de octubre de 2006 / Comentarios desactivados en Álbum Fotográfico / 1.703 lecturas
Capilla de Santa Ana. Camino de Los Molinos
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miércoles, 4 de octubre de 2006 / Comentarios desactivados en La Sima de Matillas / 5.884 lecturas
¡Atención!
El acceso a la sima de Matillas está prohibido por señales verticales y por alambres de espino. A pesar de la precariedad de las protecciones de seguridad, le aconsejamos no acercarse: peligraría seriamente su integridad física. Haga el favor de no correr riesgos innecesarios.
En La Cuesta de la Alberca, en el margen norte de la vía del ferrocarril se encuentra una de las zonas más enigmáticas de nuestro pueblo: la sima de Matillas. (A decir verdad, la llamamos de Matillas aunque está tan cerca de Villaseca de Henares y de Cendejas de La Torre, que quizás la sima ni tan solo sea de Matillas). Hecho este breve inciso, cerca el Arroyo del Hocino aparece a nuestros pies la impresionante sima. Para meternos en harina, les diremos que una sima es una cavidad que se abre al exterior a través de un pozo o conducto vertical originado por la erosión en roca calcárea o por el derrumbe del techo de una cavidad. Para entendernos y hablando en cristiano, la sima se crea porque el agua subterránea (o filtrada) ha erosionado la roca de tal modo que ha abierto cavidades, haciendo caer el techo y dejándola aflorar al exterior. Los materiales del terreno (roca carbonatada, calcárea, caliza y estratos yesíferos) son solubles al agua de rios y escorrentías de agua de lluvia y propician la aparición de este fenómeno geológico. Para que se hagan una idea, estas formaciones son degeneración y primas hermanas de las dolinas que han aparecido al paso del AVE por Zaragoza.
La sima de Matillas está vetada al paso por señales y alambre de espino, dada su extrema peligrosidad (como podrán comprobar en las imágenes que ilustran este reportaje). La sima, de incendental valor espeleológico, tiene una profundidad considerable, de unos 18 o 20 metros y paredes severamente escarpadas. Aunque científicamente desconocemos su origen geológico, todo apunta a que el paso del agua hacia el río Henares haya ido desgastando el susbuelo. Quizás algún cauce subterráneo conecta la zona con el cauce del río (cosa que no es descabellada, pues en el Barrio de Los Pozos los acuíferos siembran la zona). Cuentan algunas macabras habladurías que en tiempos la sima fue usada como escenario para ajusticiamiento canino. Otras leyendas siguen la historia y nos hacen creer en la providencia divina: algún perro logró escapar de tan infausta suerte y regresó de nuevo a su hogar, dispuesto a “sentenciar a su miserable amo”. Y es que, al final, la justicia existe.
En caso de no poder visualizar las imágenes del video superior, pueden abrir las imágnes haciendo click en estas miniaturas:
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miércoles, 27 de septiembre de 2006 / Comentarios desactivados en Panoramica de Agrosa tras el incendio / 1.844 lecturas
Sin palabras nos hemos quedado. Este es el aspecto fantasmagórico que ofrecían los terrenos de la fábrica de Agrosa tras el incendio de agosto, según una imagen de Javier Guerrero. Qué les vamos a contar, vean y juzguen ustedes mismos. Aunque a bote pronto parece el escenario de una película de terror, tras ver la chimenea de la fábrica nos dimos cuenta que sí, que es Matillas. Incluso puestos a ponernos demagógicos, la imagen se da un aire a las fotos de Chernobil tras la catástrofe. Agradecemos a Javier Guerrero, que nos envió esta dramática imagen a nuestro correo para compartirla con los lectores de Matillas.org
Nota: La imagen tiene unas medidas excepcionales de tamaño por lo que necesitará más tiempo del habitual para visualizarla. Agradecemos su espera. Hemos hecho dos versiones de la panorámica. Pulse en el enlace con el botón derecho del ratón y seleccione Descargar como:
Rectificación:
Al recibir la fotografía en el correo pensamos que tenía unos irreales tonos rojizos por una saturación excesiva del color. Así, para apagar el rojo de la imagen le dimos un lavado de retoque digital. Craso error, porque según nos indican ese color rojo de la carretera y de los depósitos de la fábrica es simplemente el polvo o espuma retardante de color rojo que utilizan los aviones contra incendios.
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lunes, 25 de septiembre de 2006 / Comentarios desactivados en Matillas.org está abierta para todos / 1.881 lecturas
No nos cansaremos de repetir que esta web está abierta a todos. Ustedes pueden enviar cualquier documento que crean de interés público usando el formulario de contacto o la cuenta de correo siguiente:
Les prometemos que revisamos lo que nos envíen, lo valoraremos y lo más seguro (casi al 100%), lo publicaremos por estos lares.
La razones de este apunte es un correo que nos envió Javier Martin en la que no sugiere que “podriamos colgar fotos de la gente que visita la web. Podría ser interesante, pues nos veriamos amigos que hemos convivido en el pueblo”. Por supuesto que pueden enviarnos fotos, noticias o temas que piensen que deberíamos publicar en Matillas.org. Y cuando decimos cualquier cosa, decimos cualquier cosa. Si alguien se anima con un jamón, pues tampoco le vamos a decir que no…
El tema de las fotos de gente de Matillas es una cuestión a la que le hemos dado bastantes vueltas en redacción. Incluso a veces pensamos que habrá gente ajena a Matillas que crea que esto es un pueblo fantasma porque nunca aparece nadie en las fotos (el único ser vivo que hemos visto por estas líneas ha sido un escarabajo rinoceronte, que ya es decir). La razón de no haber publicado fotos con gente es somos muy cautos con el tema de los derechos de imagen, y para evitar molestias inoportunas (poca gente quiere que su cara se vea por Internet) decidimos que no íbamos a publicar fotos de nadie sin su consentimiento.
Aclarado esto, si alguien tiene alguna imagen personal de interés (con gente o sin ella) y quiere publicarla por aquí previo consentimiento de los protagonistas, use nuestro formulario de contacto. Con la aprobación de quien aparece en la foto, seguramente la publicaremos. Sería bastante interesante que con la foto que añadieran información para que ubiquemos la imagen. Y como último favor, con que nos envíen un par o tres de fotos nos es más que suficiente, pues dada la línea editorial de la página no creemos que podamos publicar todas de una tacada.
Hecha esta aclaración, les agradecemos el interés en conseguir que este proyecto empiece a caminar lentamente. Y qué mejor forma de acabar esta acotación que versioneando una sentencia de J.F. Kennedy: “No preguntes lo que Matillas.org puede hacer por ti, pregúntate lo que tú puedes hacer por Matillas.org”. Continuará’
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El pueblo de Matillas (España) está situado en el noroeste de la provincia de Guadalajara, a medio camino de Sigüenza y Jadraque. Pertenece al partido judicial de Sigüenza y a la comarca de la Alcarria Alta. El río Henares cruza Matillas, fiel reflejo del clima y paisaje alcarreños. Con una población de 185 habitantes (2008), Matillas tiene todavía algo que contar. Y aquí estamos nosotros para escribirlo. Bienvenidos.
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