A Matillas o se la quiere… o no.
Imagínate que eres fan de Matillas (pero fan fan). Que en cuanto puedes te escapas pal pueblo. Y que tachas los días que faltan para el próximo puente.
¿Por qué te gusta tanto Matillas?
Pues no sabes bien porqué. Sólo te lo preguntas cuando los colegas te dicen que qué tiene Matillas que pierdes el culo por irte pal pueblo. Ellos son incapaces de captar la esencia misma de Matillas.
Es más, en Matillas son más las cosas que no hay que las que tiene. Lo que nos da el pueblo ni se compra ni se vende. No se ve, se siente.
Matillas ni es el lugar más guapo del mundo, ni el más divertido, ni es… lo más. Pero a ti eso te da igual, porque te digan lo que te digan, para ti, Matillas es… Matillas. Y punto pelota.
Y a ti ¿por qué te gusta Matillas?
Nota: Inspirado en El Ruralismo según el Rober. [1] ¡Nos tienes abandonados Rober :-(!
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